Robots colaborativos en la industria 4.0
En la actualidad, muchas plantas de fabricación están sustituyendo los robots tradicionales por robots colaborativos (cobots). A diferencia de las grandes células robotizadas cerradas con vallas, los cobots comparten espacio con las personas y están diseñados para detenerse o reducir su velocidad cuando detectan la presencia de un operario.
Gracias a la combinación de sensores de par, cámaras de visión artificial y control electrónico avanzado, estos sistemas pueden realizar tareas repetitivas con gran precisión, mientras el personal se centra en labores de supervisión, programación y mantenimiento. Esto mejora la ergonomía del puesto de trabajo y reduce el riesgo de lesiones por movimientos repetitivos.
La electrónica de potencia, los variadores de velocidad y los sistemas de supervisión SCADA permiten además monitorizar en tiempo real el estado del robot, registrar datos de producción y detectar anomalías antes de que se conviertan en averías graves. Todo ello encaja dentro del concepto de Industria 4.0, donde las máquinas están conectadas y son capaces de intercambiar información con otros equipos y con la nube.
En este contexto, los técnicos de electrónica y automatización juegan un papel clave: se encargan de instalar los sensores, parametrizar los controladores, realizar el mantenimiento preventivo y garantizar que la producción sea segura, eficiente y respetuosa con el entorno.